lunes, 19 de marzo de 2012

El Corazón del desierto

EL CORAZÓN DEL DESIERTO

Dedicado a la noble lucha del pueblo saharaui. Y, desde su lejana ignoracia, a Gala, la niña asharaui que, durante dos veranos, fue una hija para mí. 

Incluyo pinturas del pintorsaharahui Moulud Yeslem como ilustración.

1.  CAMPAMENTOS DE TINDOUF. DESTIERRO SIN MAR

     La luz se desploma en la tierra
y una pálida llamarada
se difunde sobre la arena:
el rey Sol, señor de la casa,
como en seco pozo sediento,
se asienta entre el fango  y el agua.

              … Y entonces, entre sorbo y sorbo
de una taza de café, entonces
lees los sesudos análisis,
las noticias y los informes,
las viejas lejanas historias
de ahora, las resoluciones
de entonces, y al fin te atraganta
un amargo té que te absorbe…

     No hay horizonte: la conciencia
nunca ha entendido las sentencias
y el alma es un vasto desierto
repleto de vastas palabras,
juguetes rotos, ecos, niñas,
ancianos, tumores, nostalgias,
sueños desterrados y fotos,
banderas y vientos, y el Sahara,
decían entonces, se vierte,
río de oro, en mar salada.

Y a muchos mares de distancia,
compartes el aire, los oyes,
dicen libertad, como entonces,
como siempre, el sol y el Sahara.







AMINETU HAIDAR EN HUELGA DE HAMBRE [*]

 Entre el mar y el desierto se abre un nicho,
y el suelo es la cama, la madrugada,
los ojos firmes, la voz apagada…
No hay nada que decir. Todo está dicho. 

 A veces, la historia tiene un capricho
y el silencio se convierte en portada:
un aeropuerto y una mujer delgada
dejan la diplomacia en entredicho.

 Aunque era fácil dejarse vencer,
ni tirano, ni tortura y destierro
lograron abatir a la mujer,

 cuerpo de papel, alma de hierro,
y un arma limpia: dejar de comer.
Gracias por poner la correa al perro.


* Esta admirable activista saharaui consiguió, por sorpresa, arrancar una concesión al rey de Marruecos, tras una huelga de hambre en el aeropuerto canario donde se le denegaba el retorno a Aaiun, su ciudad.



3 comentarios:

  1. Desde su lejana ignorancia, seguro que Gala también es poesía. Es "la poesía" que no queremos leer, que escondemos tras nuestro conformismo. Enhorabuena. Nos vemos el sábado. Amando.

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    2. Gala ha quedado así, como una poesía. Todo los niños dejan un hueco, aunque solo sea porque al crecer desaparece el niño que fue, aunque, a cambio, nos regalan un adulto nuevo.
      Pero el caso de Gala es distinto: ella no podía ser consciente del hueco que dejaba la última vez que se fue, hace años; la imposibilidad de saber nada de ella la convierte en una niña para siempre.
      Y el café dulce acaba convirtiéndose en un té amargo cada vez que pienso en los campamentos de refugiados saharauis, achicharrados lejos del mar.
      Gracias por tus comentarios.

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